Lo que se ve a la izquierda es la cotización del Ibex de los últimos 3 años. Tendencia a la baja. Lo que el gráfico sugiere es que el Ibex ya ha tocado fondo. Llevamos escuchando esto de los "expertos" desde hace dos años. "La bolsa está subvalorada. Ahora es el momento de invertir." Curiosamente, los gráficos son los mismos en todos los medios. Muestran solo una parte de la realidad. Y la realidad es que el Ibex tiene todavía mucha posibilidad de caer más. Hoy por hoy estamos a 7.200 puntos. Y Kirchner acaba de expropiar a YPF. A ver lo que pasa mañana.
Al mismo tiempo se lee por enésima vez que la "burbuja" del ora ha estallado.
¿Qué burbuja?
Calculando en euros, el oro ha subido en los últimos 30 días un 0,8 %, en los últimos 6 meses 4,19 %, y en el último año 23,2 %.
¿Qué burbuja se ha estallado?
Más bien uno se pregunta:
¿Quién manipula las noticias económicas? Me imagino que son los mismos que hace un par de días han declarado ilegal el uso del medio de pago oficial en la zona euro en transacciones por encima de 2.500 euros.
¿Había protestas? No he escuchado nada.
¿Por qué se ha prohibido el uso de dinero en efectivo a partir de cierta cantidad? Porque queda fuera del control estatal. Si en España la compra de oro fuera un fenómeno notable, el gobierno hubiera prohibido la tenencia de oro. Porque es un medio de pago que el Estado no puede manipular. Por eso estaba prohibido en EE.UU. desde 1931 hasta 1975.
En todo el mundo se compra oro. Salvo en España. Aquí leemos por doquier: "No pierda dinero. Venda su oro." Estas compañías piratas - que abren sus oficinas en cada esquina - pagan por el oro de los españoles que lo venden - bien por avaricia, bien por necesidad - un precio que está un 25% por debajo del precio real de mercado.
El gobierno ha dado un primer paso hacia la criminalización del uso de un medio de pago legal, llamado euro. El siguiente paso - que ya se está barajando en Suecia - el la prohibición del dinero en efectivo. ?¿Quién lo hubiera pensado hace 6 meses?
Esto obliga a todo el mundo de tener una cuenta bancaria. Y una tarjeta de crédito.
El paso siguiente es la congelación de las cuentas de aquellos que no aceptan que el Estado se meta cada día más en asuntos que antes se consideraba privados.
El Leviatán de John Hobbes, llamado Estado, ruge cada día más fuerte. Y que a nadie le quepa la menor duda que está dispuesto a devorar todo aquel que va en dirección contraria. El futuro que nos llevará hacia un Estado totalitario ya ha empezado.
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