Lo dije ayer en mi blog y hoy la tenemos la reacción de Barroso al desastre económico en Rumanía: el fondo de aucilio para países insolventes en la UE se ha agotado. Barroso propone ahora doblar la suma a 50.000.000.000 €. Sin embargo, se trata de un saco sin fondo: según estimaciones muy cautas, sólamente los países miembros del este necesitan 400.000.000.000 €, o sea: ocho veces más. Lo van a recibir, porque la UE no puede permitir que ninguno de sus estados miembros quiebre. Y esto es el inicio. Las consecuencias de haber permitido el ingreso de los países del este en la UE pasará factura. Y la factura suma y sigue.
¿De dónde viene este dinero? De un endeudamiento cada vez más importante de los estados miembros de la UE. Y del Banco Central Europea que a su vez recurrirá más tarde o temprana a la misma medida que la FED anunció anteayer: crear dinero digital.
Esto significa inflación. Lo llevo diciendo desde abril del 2007: habrá una inflación galopante una vez que todo este dinero artifical llegue a los consumidores.
Lo cierto es que con una tasa de inflación de casi 0 % de momento pocos me van a creer. Pero no olvides: antes que llege un Tsunami, las aguas se calman y retroceden.
Prepárate para el Tsunami. Y hazlo rápido.
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