Las cosas no son lo que parecen. Tampoco Obama. Desde luego no es el mesías. Y en vez de pacificar al mundo, prometió un aumento de tropas en Afganistán. Y ahora le ha pillado con su primera mentira oficial.
Hace unos días se enfadó con el grupo emresarial AIG (American International Group). AIG tenía pérdidas por orden de 100.000.000.000 $ el año pasado. Para salvar a la empresa, el gobierno de Obama les ayudó hasta el momento con créditos de 150.000.000.000 $. No obstante y a pesar de la situación,, la empresa pagó a sus altos ejecutivos gratificaciones suculentas. Obama declaró enfadado que si AIG no publicara los nombres de los destinatarios de esos pagos, llevaría el caso a los tribunales. Pero las cosas a veces se tuerce. Resulta que salió a la luz que un señor que recibió 101.332 $ ( http://www.examiner.com/x-268-Right-Side-Politics-Examiner~y2009m3d17-Obama-Received-a-101332-Bonus-from-AIG ) para su campaña electoral se llama Barack Obama. Y ahora Obama se enfada de nuevo, porque se ha publicado su nombre. Esto se llama meter la pata hasta el ....c.... (cuello)
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